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Necesidad imperiosa de la victoria para ambos equipos lo que se notó sobre el terreno de juego ya que apenas si hubo oportunidades para ambos al intentar no correr riesgos y se llevó el gato al agua el que más suerte tuvo de cara al gol.
El que más suerte tuvo fue el POZUELO en el minuto dieciocho cuando una internada por su banda izquierda coge en superioridad numérica al lateral de aquella zona y Pedro Alonso y Busto se asocian con el esférico llegando hasta la línea de fondo dónde éste último envía un centro al punto de penalti a media altura, la defensa no acierta a despejar y allí lo controla Luis Carlos que realiza un disparo a la media vuelta que se introduce sin remedio en la portería local.
Unos minutos más tarde fueron los locales los que pudieron igualar el marcador pero quedó demostrado que la negación de cara a portería ésta temporada es total, un tiro a bocajarro desde el borde del área pequeña que se estrella en el cuerpo de Nacho Gil y otro disparo raso en el minuto 25 que se pierde por poco es lo que dio de sí éste primer tiempo.
La segunda parte parecía que iba a tener otros derroteros ya que los visitantes dieron un ligero paso atrás y dejaron que fueran los tricantinos los que tuviesen el esférico pero esto no fue más que un espejismo ya que apenas inquietaban a la defensa del POZUELO.
Si en los primeros cuarenta y cinco minutos apenas hemos tenido oportunidad de señalar ocasiones de peligro para ambas porterías, la segunda aún fue peor ya que pese al dominio territorial que ejercían los locales en el centro del campo, la defensa visitante no tenía excesivos problemas para solventar los balones aéreos que, sobre todo en lanzamientos de saque de esquina y el envío de saques de banda por ambos laterales, les llegaban con todas las ventajas al centro del área.
Mientras que al POZUELO DE ALARCÓN estos tres puntos les da opciones ya que a falta de disputarse nueve jornadas está a cuatro puntos de la posible salvación, al TRES CANTOS se le han reducido sus posibilidades ya que se coloca a 12 puntos cuando quedan por disputar 27, no obstante mientras hay vida hay esperanza y matemáticamente aún es posible.
PRIMA,
